Uno podía llegar a las distintas mesas e integrarse en tre el grupo de colegas que siempre, estaban dispuestos a ayudarte cuando te atorabas en un doblez.
También se llevó acabo una pequeña exposición de piezas de diversos autores y plegadores, todas ellas de gran ingenio y dobladas hábilmente.
Lo que también me dejó sorprendido fue que nos proyectaran el desfíle de modas de Christian Dior del 2007, el cual se distinguió por sus modelos basados en dobleces y figuras de origami, realmente un acto digno de contemplarse y que demuestra que el origami puede llevarse más allá, de lo tradicional y conocido, siendo un campo amplio de experimentación.
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